martes, 20 de diciembre de 2011

Querido Papá Noel:

como te imaginarás, igual que el resto del mundo, sólo me acuerdo de ti en estas fechas y te escribo dos letras, como siempre, para tocarte un poco la moral.

Este año voy a ir un poquito más allá y darte las gracias, no por lo que me trajiste el año pasado, que no sé si te diste cuenta pero se te olvidó la lotería premiada y fue lo único que te pedí :-"

Tengo que agradecerte el haber puesto a gente tan increíble en mi camino y es que, donde menos te lo esperas, te surge un amigo con todas las letras.

También estuvo bien el haber mandado "el empujoncito" necesario para seguir hacia adelante.

¿Que cómo sé que fue cosa tuya? Bueno, pues que no se me ofendan los magos, pero la gente del norte tiende más hacia las cosas hogareñas y ese calor amable es lo que me encontré. Y tuviste que ser tú, no mientas que te crece la nariz, y no querrás parecerte a un Borbón, que con la barba, igual te confunden con el Duque de Alba... =;-)

Bueno, no te doy más la vara, o tal vez un poquito. Oye, que ya sabes que nos quedan pocos años para quedarnos sin techo. Échanos un cable anda, que lo de las mudanzas apresuradas, no suelen ser buenas.

Hiro, tocando los webos a Papá Noel, como cada navidad.

Etiquetas: ,