300, la Batalla de las Termópilas
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Aparecen todas esas cosas tan asumidas como que los buenos son los guapos mientras que la maldad física es un trasunto de la maldad moral y demás pamplinas. Y ciertamente, estos espartanos, de ser así, como para morirse: llevaban incorporadas las tablas de lavar la ropa y eran más chulos que un ocho. Creo que debí de babarme en el cine viendo tanto abdominal tan bien formado x-) También es cierto que Jerjes aparece como un digno participante del carnaval de Drag Queens de Tenerife y su harén era más bien aquel prostíbulo de carretera denominado "La teta enroscada" de cierta película de Tarantino.
Sin coñas, una peli sin demasiadas pretensiones narrativas, con unos efectos preciosos aunque un cierto abuso de la cámara lenta perdonable si tenemos en cuenta que no te deja un respiro. Me encantó la escena de la pitonisa, claramente rodada bajo aguas para generar esa sensación de tiempo retenido. Preciosa es la palabra, igual que la textura dada a todas las imágenes.
Creo que me voy a pedir un espartano para reyes x-)
Etiquetas: cine
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