Casualidades
Hay días que metes la mano en el bolso y tienes el cambio exacto. Hay días que llegas a la parada y, justo, para el autobús. Pero si sales de casa y se te rompe un tirante de la mochila, y al volver, se te rompe el otro justo al pasar por delante del zapatero... eso no es ni suerte ni una casualidad: es la mochila que te pide por favor que la lleves a reparar.
Es que con 16 años de trote, es lógico que las cosas se estropeen, pero ¡no sé que haré sin ella hasta que la reparen! :-(
Es que con 16 años de trote, es lógico que las cosas se estropeen, pero ¡no sé que haré sin ella hasta que la reparen! :-(
Etiquetas: sucesos
4 Comments:
Ja,ja,ja, si es que hasta las mochilas piden cosas hoy en día, son de un listo... :-P
mi tambien me paso: estaba en mitad de la nada, en plena naturaleza, y en cosa de 10 min primero un asa y luego la otra
asi q con la mochila en brazos el resto del dia... mmmmm no creo que ese sea el uso q haya q darle a una mochila... jajaja
Je, je, señales en tu vida! Agudiza tus sentidos ;)
Laurix, esta ya lo pedía desde hace años, pero por no dejar de usarla unos días...
Andrea, pues vaya putada, me acabas de recordar el día que fui a los Arrudos. Si se me rompe ese día, me da mal.
Alex "habrá que ello" ;-)
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