Benitos...
Cómo reparar las goteras de un tejado, primeros pasos:
1. Realizar varios meses de trámites.
2. Avisar un mes antes de que vas a hacer la obra.
3. Colocar el primer piso de andamios.
4. Reventar el farolillo de la entrada de la que realizas el paso 3.
Indispensable para la buena marcha de la obra la realización del paso 4.
Es increíble pero no conozco una sola obra en la que haya intervenido un albañil -llamados comúnmente "benitos"- donde no se haya roto algo que no debería tocarse. Cuando repararon el tejado del bloque de al lado, la parabólica de mi casa -en mi bloque- decidió un día mirar hacia otro lado sin mediar explicación alguna, curiosamente el mismo día que una grúa amaneció frente a la ventana de mi cocina. Decía el albañil de turno que él no sabía nada, aunque la pintura amarilla en el golpe de la antena decía otras cosa bien diferente -esto de ver algún CSI es lo que tiene: encuentras indicios-. Eso sí, donde un tećnico que coloca parabólicas tarda mínimo 10 minutos en orientarla y permitir que recibas la señal perfectamente, un albañil lo realiza en un:
- No te preocupes, ne, que te la giro ahora mismo.
:-? - Vamos a ver, artista... menos mal que está desenchufada y estoy deseando bajarla de la fachada antes que la sociedad se la lleve, que si no, la factura del técnico te la comes. Por cierto, déjate de girarla y bájamela, anda.
- Como quieras pero no te enfades. ¿Tienes una llave inglesa?
- Sí home, sí.- Menos mal que son ellos los benitos. Por cierto, la llave inglesa supuso dos hostias contra la ventana de la que se le cayó cuando quitaba la antena. Por suerte, estaba abierta no habiendo cristal de por medio.
Cuando se colocaron las ventanas de Morfeo... aquello fue como para colgarlos de los webos a todos y encima ahora, como las dejaron mal selladas, entra el agua en su casa y en la del vecino. Es que ni queriendo hubiera podido pasar esto, hay que poner todo el empeño del mundo para ser tan sumamente mantas y no conozco a ninguno, incluyendo los de mi familia, que sean capaces de hacer una cosa totalmente bien a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera...
¿Y los azulejos de la cocina? Eso es el no va más. El culmen del funcionalismo y las formas lecorbusianas: no hay una puñetera pared donde los azulejos hayan quedado a nivel y eso que niveles, reglas y tiempo, usaron bastantes en la obra. Aunque lo mejor es cómo dejaron los matacantos de las esquinas: por aquí entra un dedo, por aquí sobresale dos. ¿Y el pavés? Romper no rompieron ninguno, pero hay uno que es la oveja negra de la familia: donde todos están derechitos, el decidió salirse literalmente por la tangente, concretamente dos centímetros. A ver... que me gusta el rústico tradicional, no las nuevas tendencias...
En fin, que me quedan varios meses aguantando a los del piropo fácil mangaos en la ventana que tengo al lado y amargando al personal de la biblioteca. Todo sea por la conservación de los libros que están en remojo ahí dentro... Esperemos que por lo menos solucionen alguna gotera y no causen más de las que ya hay.
1. Realizar varios meses de trámites.
2. Avisar un mes antes de que vas a hacer la obra.
3. Colocar el primer piso de andamios.
4. Reventar el farolillo de la entrada de la que realizas el paso 3.
Indispensable para la buena marcha de la obra la realización del paso 4.
Es increíble pero no conozco una sola obra en la que haya intervenido un albañil -llamados comúnmente "benitos"- donde no se haya roto algo que no debería tocarse. Cuando repararon el tejado del bloque de al lado, la parabólica de mi casa -en mi bloque- decidió un día mirar hacia otro lado sin mediar explicación alguna, curiosamente el mismo día que una grúa amaneció frente a la ventana de mi cocina. Decía el albañil de turno que él no sabía nada, aunque la pintura amarilla en el golpe de la antena decía otras cosa bien diferente -esto de ver algún CSI es lo que tiene: encuentras indicios-. Eso sí, donde un tećnico que coloca parabólicas tarda mínimo 10 minutos en orientarla y permitir que recibas la señal perfectamente, un albañil lo realiza en un:
- No te preocupes, ne, que te la giro ahora mismo.
:-? - Vamos a ver, artista... menos mal que está desenchufada y estoy deseando bajarla de la fachada antes que la sociedad se la lleve, que si no, la factura del técnico te la comes. Por cierto, déjate de girarla y bájamela, anda.
- Como quieras pero no te enfades. ¿Tienes una llave inglesa?
- Sí home, sí.- Menos mal que son ellos los benitos. Por cierto, la llave inglesa supuso dos hostias contra la ventana de la que se le cayó cuando quitaba la antena. Por suerte, estaba abierta no habiendo cristal de por medio.
Cuando se colocaron las ventanas de Morfeo... aquello fue como para colgarlos de los webos a todos y encima ahora, como las dejaron mal selladas, entra el agua en su casa y en la del vecino. Es que ni queriendo hubiera podido pasar esto, hay que poner todo el empeño del mundo para ser tan sumamente mantas y no conozco a ninguno, incluyendo los de mi familia, que sean capaces de hacer una cosa totalmente bien a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera...
¿Y los azulejos de la cocina? Eso es el no va más. El culmen del funcionalismo y las formas lecorbusianas: no hay una puñetera pared donde los azulejos hayan quedado a nivel y eso que niveles, reglas y tiempo, usaron bastantes en la obra. Aunque lo mejor es cómo dejaron los matacantos de las esquinas: por aquí entra un dedo, por aquí sobresale dos. ¿Y el pavés? Romper no rompieron ninguno, pero hay uno que es la oveja negra de la familia: donde todos están derechitos, el decidió salirse literalmente por la tangente, concretamente dos centímetros. A ver... que me gusta el rústico tradicional, no las nuevas tendencias...
En fin, que me quedan varios meses aguantando a los del piropo fácil mangaos en la ventana que tengo al lado y amargando al personal de la biblioteca. Todo sea por la conservación de los libros que están en remojo ahí dentro... Esperemos que por lo menos solucionen alguna gotera y no causen más de las que ya hay.
Etiquetas: apaños, crónica social, pifias
posted by Hiroshige at 15:55
4 Comments:
Nosotros echamos la empresa constructora de nuestra casa. Hicieron paredes torcidas, la chimenea del tejado no tiene conexión con el salón (me veo poniendo una chimenea en un dormitorio, las tejas de la casa se caen de vez en cuando....
Mi marido es "benito" y cuando comenzamos nosotros a construir nuestra casa, años ha, su frase favorita era "no se puede". Y mi respuesta: Si yo lo he visto en una revista, es que se puede, solo hay que averiguar cómo!. Es un encanto, limpia, friega, pasa la aspiradora, hace la cama... Claro que si vuelves a casa después de que él se haya entretenido en ella tropezarás con el aspirador sin recoger, el cubo con el agua de fregar en medio del pasillo, la ropa del día anterior sin guardar...
Sólo hay una solución: ¡Paciencia!
Mamina, es que son igual en todas partes. Mi padre también fue benito, ahora está jubilado pero sigue armando de las suyas: un día dijo "voy a echar silicona en las juntas de la bañera" y había silicona en todas partes menos en las juntas. Tienes razón, paciencia, pero cuando pagas por ello y te la mangan de esas maneras, te apetece comer a uno :-$
Pues no te quejes. En mi casa un buen día todos los azulejos de una de las paredes de la cocina decidieron ir todos juntitos a ver a los azulejos del suelo.
Una maravilla.
Eso si nos lo arregló el constructor pero armaron tal lio y polvo en casa que mejor hubiera sido dejarlos todos en el suelo o volver a pejarlos con supergen.
Saludos.
Eso del lío es lo que me estoy temiendo cuando vengan los de las ventanas a arreglar "las filtraciones"... Ya te contaré :-|
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