La necesidad de acudir de nuevo a Il Braghettone

Gracias a Liuia me enteré de que ni Goya mismo se salva de la estupidez humana. Y no es el primero de los denominados genios de la pintura que son censurados, comenzando por el hecho más conocido que fue Miguel Ángel y su Capilla Sixtina, cuando poco después de ser pintada se contrato a Bolterra para que reformara un pelín la obra del maestro a golpe de braghettones, lo que le valió el apodo.

Una duda me surge: a un desnudo cubista analítico o una mezcla cubismo-futurismo, ¿dónde se le colocarían los cartelitos? Porque a veces resulta difícil encontrar a la persona, cuanto más encontrar la anatomía conflictiva para los pudorosos...

"Desnudo bajando una escalera", 1912, Marcel Duchamp.